ALMERÍA, MIÉRCOLES SANTO: Desbordado fervor por el Cautivo

Instantes previos a la hora fijada para la salida de la cofradía, el hermano mayor del Prendimiento, Enrique Marín Sorroche; consiliario, Juan José Martín, fiscal del paso de palio, José Antonio Miras; y José María Segura, vocal adjunto a Secretaria, se dirigieron desde la Catedral hacia el Palacio Episcopal en compañía del alcalde de Almería, Luis Rogelio Rodríguez-Comendador, para solicitar la venia e iniciar la Estación de Penitencia. El parlamentario andaluz y senador Javier Arenas, realizó en el interior del templo la primera levantá, que posteriormente repetiría el alcalde de Roquedas, Gabriel Amat, en la calle Lope de Vega.

Se abrieron de para en par las cancelas y la puerta del templo catedralicio, en un silencio expectante, ungidos por esa voz callada de la Cruz de Guía y más de trescientos penitentes de luz y cruces, entre la tres secciones de nazarenos. Vestían con solemnidad y veneración la túnica marfil con escapulario y antifaz azul, correspondiéndole a cada una de las secciones de nazarenos cera roja e incienso pasión en el Misterio del Prendimiento; cera morada e incienso primavera con Jesús Cautivo; y cera marfil e incienso estrella sublime en el paso de palio, completado con toda la liturgia y ritual simbólico procesional que nos adentró en la tarde noche del Miércoles Santo en los sagrados Misterios de la Pasión.

El primero de los pasos en salir fue el mayestático y esplendoroso paso de Nuestro Padre Jesús en su Prendimiento. Obra singular de la escultura barroca de Dubé de Luque, vestidos con las manos primorosas, sin igual, del diputado mayor Blas Marín Sorroche.

Profusamente adornado con claveles rojos y amorosamente portado por 45 hermanos costaleros, bajo la dirección perfecta de los capataces David Marín Pérez y Carlos Galice Cantón, impulsor de los costaleros en Almería, y ayudado por Juan Leal Rodríguez y Antonio Rodríguez Álvarez, a los acordes musicales de la Agrupación Musical Ntro. Padre Jesús de la Pasión de Linares.

Hay que destacar la presencia del Guión del Grupo de Artillería de Campaña II de la Legión 'Rey Alfonso XIII', como hermano mayor honorario, portado por oficiales, suboficiales y tropa con suma marcialidad y mística legionaria, invocando al Señor Cautivo de Medinaceli la protección y ayuda divina ante las loables tareas como fuerza de pacificación y labores humanitarias que realizan en determinados conflictos a nivel internacional.

Tras el Guión del cincuenta aniversario fundacional y el guión del Jubileo de las XL Horas, por ser una hermandad sacramental, y la presidencia del paso integrada por el vicario general Tomás Cano, procesionó la impresionante imagen de Jesús Cautivo de Medinaceli, 'Señor de Almería', entre iris morados, gracia inefable de Almería, máxima expresión de fervor y devoción de toda una ciudad. Preludio de una noche imborrable, un Dios, todo un Dios, se somete a la débil e inconstante justicia humana.

Las duras maderas de las trabajaderas fueron llevadas por 30 hombres valientes, dirigidos por su capataz Francisco Romero García, que estuvo auxiliado en sus funciones por Cristóbal Moya Fuentes y Javier Alonso Ortiz, que alargaban el paso para encontrar a los hombres y mujeres y redimirlos en su refugio amoroso. El Señor Cautivo fue acompañado por las promesas de miles de personas, como cada primer viernes de marzo, y las marchas de la Agrupación Musical Ntra. Sra. del Carmen, del malagueño barrio del Perchel.

Casi una hora más tarde llegaría uno de los momentos más esperados de nuestra semana pasional. El aire se quedó quieto, y sobre el cielo se cerró, una ¡soleá de soleares!, al aparecer la Virgen de la Merced, concebida sin pecado original, finamente vestida por Juan Antonio Barrios. Adornada de anthurium salmón claro por el florista Rogelio Fernández Alonso, proclamando su Maternidad Divina, que se mecía sobre un paso de palio, como un cante por fandangos, por la instruida cuadrilla de costaleros dirigidos por el magistral capataz Luís Pardo González y sus ayudantes Francisco Martínez Usero y José María Martínez, a los acordes musicales de la marcha Paloma Mercedaria, interpretada por la Banda de Música Santa Cecilia de Sorbas.

Estrenó la Merced saya bordada en hilo de oro fino, basada en unos bordados antiguos del siglo XIX, donada por Enrique Marín y bordado por Sebastián Marchante. Participaron en el cortejo procesional personas integrantes de la Asociación de Lupus, de la que es protectora la Virgen de la Merced, portando un banderín realizado en seda, plata, oro y geraspe, por Carmen Muley.

Las distintas presidencias del cortejo procesional estuvieron integradas por el hermano mayor, consiliario; vicario generalde la Diócesis, Tomás Cano; el párroco de la Preciosísima Sangre de Nuestro Señor, de Aguadulce, Ramón Garrido, sacerdote y pregonero de la cofradía este año; teniente coronel jefe del Grupo de Artillería de Campaña II de la Legión, Fernando García-Vaquero Pradal; concejales del Ayuntamiento de Almería, Gemma Pradal y Francisco Amizián; senadora María del Mar Agüero; así como los cofrades y hermanos protectores José Antonio Picón García y Luis Castillo Mesa.

El Almería.